BOOMERANG
“Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre”. 2 Corintios 9: 7
Cada día hay una victoria nueva, si te pones en las manos del Señor. Toda acción tiene una reacción. En Dios, cuando abres la puerta de tu corazón, Él entra y se sienta a la mesa contigo y cena contigo. Comparte sus bendiciones contigo. Toda causa tiene un efecto. Todo el que siembra, cosecha... Debes entender que de acuerdo a lo que siembres, será tu siega. De acuerdo a lo que digas, verás respuestas. De acuerdo a cómo digas las cosas recibirás reacciones. En fin es un círculo. Cuando das recibes, en ocasiones hasta el ciento por uno, o sea 100 veces lo que das. Wow!!! Esta es la matemática de Dios. Cuando das de corazón recibes mucho más de lo que has dado. Mucho más amor, mucho más comprensión, mucho más cariño, mucha más ternura, mucho más afecto. Si te nace del corazón con pureza y amor, lo que hagas regresará a ti lleno de bendiciones para tu vida. ¡Créelo y verás la gloria de Dios!
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