La Palabra de Dios es Fiel y Verdadera

“El que estaba sentado en el Trono dijo: ‘He aquí Yo hago nuevas todas las cosas’. Y me dijo: ‘Escribe; Porque estas Palabras son Fieles y Verdaderas" Apocalipsis 21:5

La Palabra de Dios es fiel y verdadera y lo que Él ha dicho se cumplirá. Hablando en la mañana con mi esposo y viéndolo preparar el desayuno me hizo reflexionar en aquellas cosas que Dios habla en Su Palabra. Somos vasijas de barro y Él es el Alfarero. Le decía a mi esposo lo sorprendida que estaba al ver cuánto Él ha ido cambiando. Hoy día, está haciendo cosas que jamás pensó hacer y que dadas las circunstancias ha aprendido a hacer.  No únicamente las ha aprendido, sinó que las hace con amor y dedicación. Verás, Dios nos envió a vivir a otro país; un país en el que las estaciones del año se sienten genuinamente, incluyendo el frío.

Mi esposo reacciona rápidamente ante bajas temperaturas y prefiere no exponerse a ellas. Cuando vivíamos en el trópico, me decía que sería imposible y que ni soñara en mudarnos a otro lugar y menos que tuviera temperaturas tan bajas. Sin embargo, Dios nos habló, abrió las puertas y nos mudamos lejos del trópico y sus tibias temperaturas. Pensé que no se acostumbraría al frío, mas no fue así. Hemos sido testigos oculares de las transformaciones que este movernos en las instrucciones del Señor ha traído a nuestro hogar y a cada una de nuestras vidas en particular. La Palabra de Dios es Fiel y Verdadera, lo hemos vivido y testificado.

Es esa Palabra de Dios, la que me fue dada hace muchos años, que me decía que iba a llevar su Palabra allende los mares, cuando vivía en una islita caribeña. Pasaron muchos años desde que había recibido esta Palabra y no tenía ni idea de cómo o cuándo se cumpliría. Ocurrieron muchas situaciones difíciles en durante esos años, pero la Presencia del Omnipotente nunca se apartó de nosotros. Hace dos años, Dios volvió a hablarme acerca de la Palabra que me había dado muchos años atrás.

En diciembre de 2011, mientras mi esposo me llevaba al trabajo, tuve una revelación. Estando despierta vi en mi mente que estaba en mi salón de clases. Vi que salía del salón y cerraba una de las puertas de madera, por fuera del salón. Inmediatamente, entraba por la puerta de acrílico y la cerraba tras de mi, dando la impresión de que no había nadie en el salón. Así mismo, tomaba uno de los pupitres de mis alumnos y lo ponía cerca de la puerta de madera y me hincaba a orar. Luego, veía que me levantaba de la oración, e inmediatamente la puerta de madera se abría y la conserje entraba al salón. Al verme, se turbaba y me decía: “Misi, perdóname, vi la puerta cerrada y pensé que no había nadie en el salón y vine a limpiarlo.” Así terminó la visión y no le di la mayor importancia, pues pensé que era producto de mi imaginación.

Mas tarde, ese mismo día, ya en el trabajo la visión volvió a mi mente. Me sentí muy inquietada por el Espíritu Santo a seguir las instrucciones que me había dado. En un principio me negué, porque tenía mucho trabajo que hacer, mas Él siguió impulsándome a seguir las instrucciones (luego entendí que eran instrucciones). Así que me levanté de mi escritorio, cerré la puerta de madera por fuera, cerré la puerta de acrílico por dentro, tomé uno de los pupitres, lo acomodé al lado de la puerta de madera y me hinqué a orar.

Mientras oraba, Dios comenzó a mostrarme, lo que acontecería. Me indicó que nos sacaría de la isla, que sería a mediados del semestre escolar y que nos mudaríamos a ese lugar donde se ven las cuatro estaciones del año. Habló a mi corazón otras cosas, pero esas me las reservo por el momento, porque son muy delicadas. Luego, en enero 31 de 2013, recibí una llamada telefónica ofreciéndome trabajo en ese país. Quedé turbada, con lo que estaba escuchando, no sabía cómo reaccionar. Recuerdo haberle dicho a aquella persona que tenía que consultarlo con mi familia y orar para que Dios me mostrara si esa era su voluntad para nosotros … Así fue como todas las cosas comenzaron a fluir y salimos de nuestro amado terruño.

El amor, respeto y obediencia a Dios nos lleva a hacer cosas que jamás pensamos hacer; dejar la tierra y parentela para caminar hacia el lugar dónde Él nos envía. Hay cosas que para el hombre normal son locura, pero cuándo andamos en los Caminos del Altísimo, la locura es parte de nuestras vidas. Así que aquí estamos, esperando ver y experimentar las cosas de las que Dios nos había venido hablando y este año han comenzado a cumplirse.

No ha sido fácil, ha habido muchas lágrimas. Hemos dejado nuestra familia y aún nuestras propiedades materiales, por obedecer el Llamado de Dios. Lo hemos hecho porque sabemos que la obediencia a Él es mejor que el sacrificio y que Él dará aún más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, cuando obedecemos su Voz. Ya hemos empezado a experimentar cambios, cambios en mí, pero más impresionante son los cambios en mi esposo ... Entonces, podemos decir que: “El hacer Tú Voluntad, Dios mío, me ha agradado…” Salmo 40:8a.  Dios es Fiel y Verdadero; su Palabra es Fiel y Verdadera y siempre se cumplirá.  ¡Yo soy testigo!

¡No temas, Cree solamente!

En el amor de Jesús,

Maribel Román Santiago©

Noviembre 29, 2013

Maryland, USA

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